El mouse óptico es una de las partes más delicadas de la computadora. El mismo tiene la ventaja de no necesitar un mantenimiento constante, sin embargo, suele acumular polvo que poco a poco va influyendo de forma negativa en su funcionamiento provocando roturas o desgastes del lente. Te damos unos consejos para limpiar el mouse de manera fácil para evitar futuras fallas.
El mouse óptico generalmente sufre algunos daños, ya sea por desgaste o por golpes que ocasionan las siguientes fallas:
- Menor precisión.
- El puntero del mouse se mueve solo, ya que el haz de luz tiene menos potencia.
- Las teclas o clicks hay que presionarlas mucho mas para que funcionen.
- La rueda del mouse se traba.
Herramientas y Materiales a usar
- Destornilladores (de precisión o de "relojero").
- Hisopos
- Alcohol
- Paño
Pasos para limpiar el mouse o ratón
- Desconecta el ratón del computador para evitar problemas eléctricos. Si se trata de un ratón inalámbrico, apágalo.
- Destornilla los 2 tornillos principales que unen la parte de abajo con la de arriba.
- Agarra un hisopo mojado con un poco de alcohol y limpia el circular lector que emite el haz de luz rojo.
- Limpia la rueda que se encuentran al costado de la misma con un hisopo, cuidando que no haya pelusas.
- Deja que todos los componentes del ratón sequen bien antes de volver a limpiarlo y cerrarlo.
- Cierra el mouse y conéctalo a la computadora.
- Revisa si el mouse funciona correctamente.
- Limpia también la almohadilla sobre la que deslizas el ratón con un paño húmedo y un poco de alcohol.